En el estilo mediterráneo las fachadas suelen utilizar materiales naturales. Los colores típicos de las fachadas mediterráneas son cálidos y terrosos, como el blanco, el crema, el terracota, el ocre. Estos colores reflejan la luz del sol y se integran con el paisaje circundante.

Las Tejas Renacimiento son una característica icónica de las casas mediterráneas. Las ventanas y puertas suelen ser de madera y a menudo están enmarcadas por persianas de madera o hierro forjado. Los arcos y las molduras decorativas son comunes en las aberturas.

Las fachadas mediterráneas a menudo cuentan con balcones de hierro forjado y terrazas que ofrecen vistas al mar o al paisaje circundante. Los detalles ornamentados, como barandillas decorativas, azulejos pintados a mano y mosaicos, son comunes en las fachadas mediterráneas.

Las casas mediterráneas a menudo tienen plantas en macetas, enredaderas y jardines con vegetación exuberante que complementa la fachada y crea un ambiente fresco y acogedor. Algunas fachadas mediterráneas tienen techos planos o terrazas en la parte superior, que se pueden utilizar como áreas de descanso al aire libre.

En general, las fachadas de estilo mediterráneo evocan una sensación de relajación y elegancia, y están diseñadas para integrarse armoniosamente con el entorno natural. Este estilo es muy popular encontrar Teja Renacimiento ya que por su variedad de colores se pueden adaptar fácilmente a la estética mediterránea.